Religión de la Cultura Caral

La mayoría de las antiguas civilizaciones del planeta están asociadas a cultos y ceremonias religiosas que les otorgan carácter de estados teocráticos; en el caso de la civilización más antigua de América (Caral) veremos diferencias respecto de otras culturas manifestadas a través de la Religión de la cultura Caral.

Cómo era la organización religiosa de Caral

A diferencia de otras civilizaciones que generaban actividades religiosas para establecer un poder central en torno a un monarca; los integrantes de la cultura Caral tenían una concepción distinta del mundo, donde la intención principal era vivir en armonía con el medio geográfico y sus recursos.

En este sentido, y a pesar de que fueron concebidos como una civilización profundamente religiosa y considerados como un estado teocrático; el estado no tuvo dirección hegemónica sobre la sociedad, en cambio dirigió en conjunto a la sociedad civil que se desarrolló en paralelo. Así que las decisiones eran tomadas entre ambas partes.

Los representantes religiosos eran llamados curacas, y había uno de ellos por cada pachaca o asentamiento.

Por que se le consideró un estado teocrático

La cultura Caral fue considerado un estado teocrático debido a que todos sus desarrollos o actividades fueron basadas en elementos arquitectónicos religiosos; una muestra de ello es la ciudad sagrada de Caral, cuyas construcciones se basaron en la pirámide mayor y otras edificaciones de profundo carácter religioso.

Los cultivos estaban dirigidos por los buenos augurios de los curacas, quienes predecían las condiciones naturales para el buen proceso de las cosechas. Además, generaban actividades religiosas guiadas donde hacían ceremonias y ofrendas para garantizar buenas cosechas, éxito en la pesca e incluso avances en desarrollos de medicina y tecnología.

En general, se trató de una civilización muy creyente que no necesitó de creación de armas, ni medios de violencia para hacer cumplir las normas; pues, estaban correctamente guiados por la máxima autoridad religiosa en cada asentamiento.

Después de asistir al trabajo, cada integrante de los asentamientos se dirigía a rituales donde reinaba la danza y música en torno a fuego sagrado en templos y edificaciones ceremoniales públicas. Esto permitía la cohesión de la sociedad como componente base en el sistema religioso.

Elementos religiosos presentes en la ciudad sagrada de Caral

La ubicación de la ciudad entre la naturaleza de las dunas y áreas sobre terraza aluvial, permite otorgar un carácter de ciudad sagrada; además, es también conocida como la ciudad de las pirámides debido a la presencia de 6 grandes pirámides que componen la estructura completa.

Comprende un área de 50 ha y tiene un total de 32 edificaciones, entre las que se encuentran las 6 pirámides, altares, almacenes, residencias, calles, entre otras. Además, posee las siguientes manifestaciones religiosas:

Templo del Anfiteatro

El denominado Anfiteatro de la ciudad sagrada de Caral está considerado como un templo en U con una pirámide central y dos alas laterales más un patio hundido; todos con significado de linaje superior para la estructura principal, el lateral izquierdo para el linaje descendiente de la línea paterna.

El lateral derecho asociado al linaje descendiente de la línea materna, y el patio hundido con el linaje inferior.

Otras construcciones

Se han hallado otras construcciones importantes en la ciudad sagrada de Caral tales como “El altar del fuego sagrado”, “El pequeño templo de la banqueta”, “depósito especial de ofrendas”, “El templo mayor” y otras.

Se debe tener en cuenta que ciertas edificaciones como “El altar de fuego sagrado” solo tenían acceso ciertas personas como las autoridades religiosas o los curacas.